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El moho en la ducha es uno de los problemas más frecuentes a los que debemos enfrentarnos. La humedad en el baño es casi inevitable y necesitamos remedios caseros para luchar contra ella.
El moho en la ducha es un problema mucho más peligroso de lo que puede parecer. No sólo provocará que el agua fluya con menos presión o que tengamos problemas en las cañerías. También dará una sensación muy desagradable e incluso puede provocarnos problemas de salud.
Por suerte, existen muchos trucos caseros perfectos para eliminar el moho de las zonas más difíciles. Hemos recopilado los seis que mejores resultados logran.
Los seis remedios caseros para limpiar el moho de la ducha
Hay trucos sencillos increíbles para conseguir que tengamos el baño mucho más limpio. Sin embargo, también hay algunos que se hacen virales en redes sociales y no dan resultados.
Para que no pierdas el tiempo te hemos recopilado los seis remedios caseros para eliminar el moho de la ducha que sí tienen resultados comprobados. Son los siguientes:
Vinagre y bicarbonato
El vinagre blanco y el bicarbonato generan una reacción efervescente y ligeramente abrasiva perfecta. Gracias a ello, consiguen eliminar toda la suciedad sin mucha dificultad.
- Mezcla en un recipiente tres cuartos de agua y uno de vinagre. Añádele el bicarbonato.
- Agita y aplica la mezcla por encima del moho.
- Deja que haga efecto durante, mínimo, media hora.
- Frota con un paño húmedo y aclara con agua.
Lejía con agua
Con la lejía hay que tener mucho cuidado, pero si hay demasiado moho puede ser la mejor opción. Según la gravedad dilúyela más o menos con el agua.
Contiene agentes desinfectantes perfectos para destruir las esporas de moho. Lo más recomendable es que utilices un pulverizador para extender la mezcla de lejía y agua por las zonas afectadas.
Vinagre con agua
Hay algunos estudios que consideran que la mezcla de bicarbonato y vinagre puede neutralizarse entre sí. Por eso, si has probado y no te ha funcionado una alternativa es eliminar uno de los dos factores.
Los pasos a seguir son los mismos, pero sin el bicarbonato. También puedes dejar que haga efecto sobre la zona durante más tiempo. Por ejemplo, una hora.
Agua y amoníaco
El amoníaco es soluble en agua y uno de los químicos más utilizados en limpieza. Se trata de un agente alcalino y tiene una grandísima capacidad para disolver el moho.
Es una sustancia muy fuerte y olorosa así que ten cuidado a la hora de utilizarlo. Jamás lo mezcles con otros remedios caseros como la lejía porque podría desprender sustancias tóxicas.
Agua oxigenada
El agua oxigenada es un blanqueador desinfectante que te ayudará a eliminar el moho de la ducha. Sobre todo funciona con las placas más pequeñas de moho.
Lo más recomendable es que utilices un pulverizador para que llegue a los lugares más difíciles.
Aceite de árbol de té
Algunos estudios señalan que el aceite de árbol de té contiene sustancias que eliminan el moho y todo tipo de bacterias.
Mézclalo en una taza con agua y añade varias cucharas de aceite. Después aplícalo sobre el moho. Cuando hayan pasado unos minutos, frota con un paño húmedo.